Viendo los avances, decidí tomar el curso de la 2ª parte de lectoescritura, matemáticas y adecuaciones curriculares en Declic, por lo que procuré tomar muchas fotos, algunos videos y guardar celosamente todo aquello que estábamos ocupando, para poder documentar mi caso y presentar nuestro trabajo el 20 y 21 de febrero 2015.
El viernes 17 de enero 2015 llegué del trabajo a casa y me topé con la sorpresa de que David ya leía de manera silábica, llegó con un paquete de tarjetas-palabra con los nombres de películas infantiles y me leía cada una pero en sus ojos brillaba esa emoción que sólo un niño puede saborear cuando visualiza el éxito. Requirió de tan solo una semana más para que ya estuviera leyendo textos cortos. La primera semana de febrero envié un video con una lectura completa de un libro de Cars a CAPA.
Aún estamos afinando el proceso de lectura y escritura, tomando dictado, estimulando con crucigramas (con juegos de mesa, en papel y en la computadora), agregando palabras nuevas y aplicando la misma en diferentes contextos, desarrollando lectura de comprensión. Quiero comentar que esto le está ayudando a David a desarrollar un lenguaje más complejo; se expresa con frases mejor estructuradas. Ya no son mensajes cortos como: “yo quiero pan, no quiero pollo, papá está en casa, cuaderno dentro mochila” ahora puede decir
“Yo quiero otro pan, no quiero más pollo, papá está en la casa ,el cuaderno está dentro mochila”.
Pone atención en las palabras escritas y la forma en cómo se acomodan, para buscar expresarse de manera más descriptiva y más emocional.
Sé que ya hemos logrado un enorme avance, sin embargo la siguiente etapa tiene su propia complejidad, pues ahora requeriremos que comprenda lo que lee. Las personas con autismo son literales, así que la lectura de comprensión para un manual de procesos concretos les es fácil de entender; pero en otro tipo de lectura (la poesía, el sentido figurado, el de justicia, las ideas entre líneas) les resulta más complicado, y aún está muy lejos de su proceso de compresión.
No obstante, seguimos leyendo fragmentos de poesía de Benedetti los sábados y entre semana el libro El Principito porque ahora ya estoy capitalizando la experiencia, ahora sé que LA PIEZA QUE FALTABA SIEMPRE ESTUVO AHÍ, solo que es cuestión de acomodarla, tener paciencia para dejar madurar los conocimientos de manera firme y el resultado se estará dando por añadidura.
Sigo teniendo fe, no únicamente en mi hijo, pues continúo apostando al proceso de aprendizaje que tiene en CAPA, así como al que nos han brindado Declic; la escuela Primaria “Prof. Benjamín Gurrola Carrera” y a todas las personas que continúan apoyándonos desde el control remoto, y por qué no, también en el propio sistema educativo, pues en esta pequeña etapa tuve la oportunidad de ver el otro lado de la moneda. Convivir con las profesoras y profesores de las escuelas especiales CAM, de USAER y escuelas inclusivas. Apreciar todos los retos por los que pasan, y que a pesar de ello, siguen preparándose, esforzándose por TODOS LOS NIÑOS QUE NADIE QUIERE EN SUS ESCUELAS.
Hoy más que nunca estoy consciente de que nuestro papel como padres no es cumplir como un elemento pasivo; quiero aclarar que nuestra función nunca es el ser terapeuta o profesor de nuestros hijos; pero sí conocer el proceso para ser co-partícipes y equipo complementario en casa, en la calle y en todo ámbito en el que nuestros hijos se desarrollen. El conocer la metodología nos brinda la confianza de que estamos en el camino correcto, que cada etapa tomará su respectivo tiempo; que en ocasiones el ritmo será lento, pareciendo que casi nos hemos estancado; pero otras más serán muy rápidas. Todo dependerá de la increíble diversidad presente en cada niño y niña, de sus habilidades, y por supuesto, también del proceso de preparación previa y lo que el entorno en casa, escuela, comunidad, les brindemos.
Compañeras madres, compañeros padres, les invito a que no desistan, no dejen de seguir intentándolo, porque no sólo ustedes quieren que ellos lean, nuestros niños y niñas con discapacidad
TAMBIÉN TIENEN LA ILUSIÓN DE
LEER Y ESCRIBIR. Y TIENEN EL DERECHO DE LOGRARLO. QUIEN PERSEVERA CON EL MÉTODO ADECUADO ALCANZA LA META.
También es importante reivindicar el papel y reconocimiento del trabajo DE COMPROMISO DE MUCHOS de nuestros profesores, si tú no los respetas no esperes que tu hijo lo haga. Sin este lazo de confianza y respeto a esta noble labor, no se establecerán términos sanos en ninguna de sus relaciones. Yo ya realicé el ejercicio; la planificación, revisión y realización de material es una labor titánica por sí sola. La adaptación y aplicación del método en cada uno de los casos requiere en verdad una meticulosa especialización de cada uno de los alumnos y alumnas. Los invito a que valoremos este valioso recurso, porque la educación es la riqueza más grandiosa que podremos heredarle a nuestros hijos e hijas.
Si LOGRAMOS UNIR ESFUERZOS EN LA MISMA DIRECCIÓN, con pequeños pasos, día con día, iremos cerrando el ciclo de la comprensión y aplicación práctica en su desarrollo académico, social y personal. Toda esta historia se resume en una frase que me encanta de Declic:
“Compartir es el camino a la inclusión”.
María del Carmen Jurado R Orgullosa mamá de David